Comenzó la entrega de credenciales para quienes optan por el autocultivo como vía de acceso al cannabis medicinal, con el objetivo de acreditar que las plantas tienen como fin el uso terapéutico. Esta iniciativa se impulsa como una medida más de protección ante procedimientos policiales que terminan criminalizando a pacientes continúa a pesar de que la justicia ha dado señales claras de que el autocultivo en Chile se encuentra justificado cuando es para uso personal o para atender un tratamiento médico.
La iniciativa es un acuerdo colaborativo de Fundación Daya, Fundación MamáCultiva y la Unión Comunal de Juntas de Vecinos, junto al Municipio de Quilicura, para dar un respaldo a los vecinos de la comuna que son usuarios de cannabis medicinal.
“El objetivo principal de las credenciales que estamos entregando a los vecinos de Quilicura que cultivan cannabis para sus tratamientos médicos es darles un respaldo para que en caso de que lamentablemente exista un allanamiento policial, no sean criminalizados ni tratados como delincuentes”, dijo la Presidenta de la Fundación Mamá Cultiva, Paulina Bobadilla.
La comuna de Quilicura ha sido pionera en apoyar el cannabis medicinal, siendo uno de los primeros municipios en hacerse parte del proyecto realizado en alianza con Fundación Daya, en 2014. Dicho proyecto ha permitido el acceso por parte de los habitantes de la comuna al fitofármaco Cannabiol -hoy descontinuado por el ISP-, elaborado por Laboratorios Knop, en base a la materia prima cultivada por nuestra Fundación; y permitió tratar gratuitamente con este medicamento a 200 vecinos por el plazo de un año.
El Municipio lanzó un libro en agosto del año pasado que recopila las vivencias de 22 mujeres que aliviaron diversas patologías con esta terapia, “Valientes: Testimonios de Quilicuranas renaciendo con la Cannabis Medicinal”; y el alcalde Juan Carrasco anunció la creación del primer Centro de Terapias Alternativas de la comuna, donde se incluye el cannabis, tras las 4.800 firmas que respaldaron esta necesidad de los vecinos.
Debido a la interrupción del fitofármaco Cannabiol por parte del ISP, que dejó, no solo a los 200 pacientes de Quilicura sin la posibilidad de continuar su tratamiento, sino a 2.500 en todo el país, iniciativas como esta credencial que da respaldo institucional a quienes autocultivan, permite seguir consolidando esta vía de acceso con mayores garantías y apoyo de la comunidad para los pacientes. Estamos confiados que se replicará en otras comunas y generará redes de apoyo a quienes más lo necesitan.