Este martes 28 de enero, en Rancagua, ambas organizaciones firmaron un acuerdo de colaboración para aunar sus esfuerzos en el camino de la construcción de una salud digna para todos, respetando la autonomía de pacientes y cuidadores, en la búsqueda de alternativas terapéuticas orientadas hacia el buen vivir. Tras la firma del convenio, la Directora Ejecutiva de Daya, Ana María Gazmuri, ofreció una charla abierta a la comunidad rancagüina sobre el uso medicinal del cannabis, su historia, la experiencia internacional y nacional con sus diversas regulaciones y su uso clínico en distintas condiciones de salud.
En Chile, el 98% de las personas que cuidan gente postrada, discapacitada o dependiente, son mujeres. De estas, casi el 70% padece del «síndrome del cuidador», un estado de profundo desgaste a nivel físico, emocional y mental. La asociación Yo Cuido, es una organización dedicada a visibilizar el rol del cuidador y la cuidadora, y sus derechos básicos. Yo Cuido está presente en todo el territorio nacional, reuniendo a cuidadores de pacientes con diversidad funcional, en situación de discapacidad, enfermedad grave o poco frecuente y condición diferente.
Para esto, sus dirigentas y participantes han asistido a varias mesas de trabajo en el Congreso, cuyo fruto es el proyecto de modificación de la ley 20.422 que se tramita hoy en el parlamento, y que busca reivindicar la labor y la dignidad de la gente que cuida de familiares, seres queridos y personas que lo requieren. Yo Cuido también ha estado comprometida, junto a Fundación Daya, Fundación Mamá Cultiva y otras organizaciones de pacientes como Fibromialgia en Acción, en impulsar el avance de la Ley Cultivo Seguro, aprobada con un 88% de los votos en la Cámara de Diputados, y hoy estancada en la Comisión de Salud del Senado. Este proyecto de ley busca evitar la incautación de las plantas de cannabis de pacientes que cuenten con su prescripción médica.
Más de cien personas llegaron este martes 28 al Salón de Honor de la Municipalidad de Rancagua para participar de la actividad, gratuita y abierta a la comunidad. El acuerdo busca implementar un trabajo conjunto en pos de la salud y calidad de vida de las pacientes y sus familias. Esta colaboración incluye ámbitos como la educación, el fortalecimiento de las redes comunitarias y la facilitación del acceso a diversas terapias, contemplando dentro de estas, el uso medicinal del cannabis. Los miembros de la agrupación Yo Cuido podrán beneficiarse con atenciones terapéuticas y médicas a bajo costo, así como acceder a todos los beneficios que tienen los pacientes de Daya, entre otros. También comparten el objetivo ambas organizaciones de incidir en la generación de políticas públicas que protejan la salud de manera digna e inclusiva.
“Estamos muy contentas con este acuerdo de colaboración: la labor de los cuidadores es dura y muchas veces invisibilizada. Esto viene a ayudar no sólo a nosotras sino que a nuestros seres queridos, a quienes atendemos veinticuatro horas al día, los siete días de la semana”, dijo Mariela Serey, la Presidenta de Yo Cuido, quien firmó el documento junto a sus compañeras María Eugenia Ahumada, Coordinadora de la Región de O’Higgins; y Paloma Olivares, Coordinadora de la Región Metropolitana.
“Duele tanta soberbia, duele que existan médicos y sociedades médicas que pretendan cerrar esta discusión por arriba sin escuchar los testimonios de los pacientes. Es incomprensible; el uso medicinal del cannabis es una realidad extendida no solo en Chile sino que en todo el mundo. Seguir negándolo es tapar el sol con un dedo, genera sufrimiento, daño y vulnera nuestros derechos. Valoramos y admiramos la labor que la Asociación Yo Cuido ha desarrollado. Su acción nace desde una de las tareas con menos reconocimiento social, esto es, la función irremplazable que cumplen aquellas personas que se han dedicado en cuerpo y alma al cuidado de familiares y cercanos que padecen males crónicos, incurables o de largo tratamiento. Parálisis cerebral, epilepsia, TEA, hiperactividad, espasticidad, cáncer, por nombrar sólo algunas, son parte de la vida cotidiana de muchos. Asoma entonces la urgencia por atender no sólo los padecimientos de las personas directamente enfermas, sino que hay que hacerse cargo de sanar y tratar a las cuidadoras”.
Tanto la agrupación Yo Cuido como Fundación Daya, comprometidas con los desafíos que entraña la lucha por una verdadera inclusión, extienden sus brazos a lo largo del país, generando redes de apoyo, contención y afecto.
Revisa el documento firmado: Convenio Yo Cuido