Una carta firmada por más de 360 pacientes usuarios del fitofármaco en base a cannabis, organizaciones de la sociedad civil, municipalidades y médicos, fue entregada este miércoles en dependencias del Instituto de Salud Pública (ISP), exigiendo que se desbloquee el acceso al producto nacional en base a Cannabis, elaborado por Knop Laboratorios, Cannabiol.
Santiago, 27 de febrero de 2020.- Son más de 2.500 los pacientes que han visto interrumpido su tratamiento médico por el rechazo del ISP a la elaboración de una tercera partida del fitofármaco en base a cannabis, Cannabiol, en noviembre de 2019. Fundación Daya canalizó la afectación y molestia de cientos de pacientes para los cuales esta medida no es aceptable, entregando este miércoles 26 de febrero una carta firmada por pacientes, médicos, municipalidades, asociaciones de pacientes y fundaciones, dirigida a la Directora del Instituto de Salud Pública (S), María Judith Mora, y ser escuchados.
La misiva firmada por 362 pacientes usuarios de Cannabiol, 23 médicos, 6 Municipios y 7 organizaciones sociales de pacientes, solicita reanudar el acceso a este fitofármaco nacional. Durante dos años Cannabiol mejoró la calidad de vida de los pacientes, quienes fueron supervisados mediante un proceso de farmacovigilancia activa por sus médicos tratantes, mismos que prescribieron el fitofármaco. El medicamento chileno tiene un precio mucho menor que la única alternativa disponible en Chile, Sativex, fármaco inglés en base a Cannabis, que cuesta 13 veces más caro, lo que lo convierte en una opción fuera del alcance de la inmensa mayoría de los pacientes. Por otra parte, es importante señalar que estos pacientes no habían encontrado el alivio necesario con fármacos convencionales, muchos de ellos con efectos adversos, muy superiores al Cannabis.
“Ante el bloqueo del Instituto de Salud Pública (ISP) a la producción de una nueva partida de fabricación del fitofármaco en base a cannabis, acudimos formalmente ante Ud. para solicitar que se revoque esta decisión. Apelamos no sólo a la efectividad que Cannabiol demostró para este grupo de solicitantes y al grave deterioro en la calidad de vida que el descontinuar su uso les ha provocado, sino que llamamos a la autoridad a actuar en beneficio de una creciente comunidad de pacientes que ven vulnerado su derecho a la salud al serles negado el acceso a este fitofármaco. Muchos de ellos accedían a este tratamiento de manera gratuita, gracias a gestiones de sus municipios, los que implementaron programas municipales de cannabis medicinal, hoy interrumpidos. Los cientos de firmas de esta solicitud expresan el sentir de miles de personas que han tenido que sufrir la interrupción de un tratamiento que, al fin, nos dio buenos resultados”, dice un extracto de la carta.
La razón que esgrimió el ente público para el rechazo fue, “la no justificación de una necesidad urgente”, argumento que desconoce la crítica situación que viven los usuarios de Cannabiol y el reconocimiento previo de la apremiante condición de estas personas, bajo el cual fue autorizado inicialmente, no solo Cannabiol, sino con anterioridad, otro producto importado de origen canadiense. Este rechazo cierra una vía de acceso al cannabis medicinal que ya estaba habilitada con las dos partidas aprobadas anteriormente (una en diciembre de 2017 y otra en agosto del 2018).
“Esperamos que la autoridad sea capaz de hacerse cargo de este conflicto con un sentido de humanidad, compasión y respeto por los derechos de los pacientes usuarios de Cannabiol. El avance del Cannabis Medicinal es una realidad global, siendo los propios Estados los que suman esta alternativa a sus prestaciones sociales de salud, lo que contrasta con el retroceso que hemos sufrido en Chile; preocupa esta desconexión local frente a esta realidad mundial”, continúa la misiva.
Otro argumento esgrimido por la autoridad es que una tercera autorización se traduciría en un permiso permanente, lo que, lejos de representar un problema, sería un gran avance para una creciente comunidad de pacientes. No han existido efectos adversos serios, sino muy por el contrario, la experiencia de los pacientes usuarios y de sus propios médicos ha sido positiva.
Con la entrega de esta carta se inicia un proceso que incorporará más pacientes afectados, los que siguen consultando sobre esta situación. Se seguirán sumando apoyos institucionales, así como se incorporará a más profesionales de la salud que han visto los beneficios que este tratamiento ha generado en tantas familias chilenas.