Lamentamos que el Diputado Irarrázaval difunda información tergiversada sobre el proyecto que realizó Fundación Daya en 2015 junto a diversos municipios del país, sin consultarnos y conocer nuestra versión.
Fundación Daya destinó la totalidad de los recursos para los objetivos del proyecto entre los años 2015 y 2016 y logró con ello generar las condiciones para su consecución, a pesar de las resistencias que despertó. Se consiguieron los permisos del SAG para la importación de semillas, para el cultivo y la cosecha, el que se realizó exitosamente, contratando a alrededor de 80 personas, cumpliendo con ellos los plazos pactados en el convenio. Se logró también que el laboratorio que desarrollo el producto fuera autorizado para la distribución de los mismos a las farmacias comunales.
Fundación Daya ha asumido muchas obligaciones que les correspondía a las municipalidades hacer para dar los pasos necesarios que permitan avanzar. Los municipios de Quilicura, Chillán, Graneros y Antofagasta lograron llevar los tratamientos a pacientes de sus comunas gracias a las acciones que les correspondía realizar para ello, como la de habilitar un espacio de atención, recibir las capacitaciones impartidas por Fundación Daya y la firma del convenio con el laboratorio para la recepción de los fitofármacos en sus farmacias comunales. Este proyecto no fue una externalización de un servicio, sino un proyecto colaborativo que requería de obligaciones por parte de las municipalidades para la implementación del programa y en eso han fallado aquellos que no lograron concretar la entrega de los tratamientos. No contábamos con vínculos políticos y se sumaron municipios de todas las tendencias.
Las rendiciones de cuenta se entregaron a todos los municipios participantes en diciembre de 2016 por la totalidad de las subvenciones y solo hemos recibido observaciones por parte de cuatro municipios, las que Fundación Daya ha subsanado en su totalidad. Desconocemos, sin embargo, la forma en que, a partir de nuestra rendición y subsanaciones le fuera enviado por parte de los municipios a Contraloría.
La falta de acción de algunos municipios ha impedido la concreción del proyecto en sus comunas a pesar de nuestra insistencia durante cinco años para que así lo hicieran. Cinco años que hemos seguido trabajando con recurso propios. El mismo Diputado Irarrázaval fue concejal de la comuna de Calera de Tango desde donde se aprobó el proyecto y no hemos recibido interés de su parte para conocer el desarrollo del mismo, ni menos apoyo para hacer cumplir el convenio por parte del municipio como así lo establece, a saber, el de comprometerse a realizar todos los esfuerzos necesarios y que estén a su alcance, para que la ejecución del mismo sea exitosa en cuanto a alcanzar el logro de sus objetivos señalados en el presente instrumento.
Hacemos un reconocimiento a los municipios que han llegado a buen puerto con la entrega de los tratamientos porque son la prueba viviente de la viabilidad y del cumplimiento de todos los pasos necesarios para realizar el proyecto, a pesar de las fuertes resistencias que buscaban verla fracasar.
Cabe señalar que antes de iniciar el proyecto, Fundación Daya solicitó un pronunciamiento a la Contraloría General de La República sobre la viabilidad de este, y quien se pronunció favorablemente.
El proyecto tuvo visibilidad mundial y permitió seguir abriendo puertas que posibilitó hoy más de seis cultivos legales desarrollándose en el país y cinco cadenas de farmacias que distribuyen productos farmacéuticos en base a cannabis.
Esperamos que se despejen las sesgadas acusaciones que no dan cuenta de la versión de Fundación Daya y ni siquiera menciona a los municipios que han logrado llevar exitosamente los tratamientos a sus vecinos.